En una jornada que puso de relieve el valor de la lectura como herramienta de transformación social, el Club Rotario de Carmelo entregó libros a seis escuelas primarias de la ciudad en el marco de la conmemoración del Día Nacional del Libro, celebrado en Uruguay cada 26 de mayo.
La iniciativa, realizada la semana pasada, incluyó la distribución de material bibliográfico en las escuelas N.º 5, N.º 6, N.º 11, N.º 92, N.º 114 y N.º 117. La entrega se llevó a cabo en un clima de cordialidad y compromiso, con la participación activa de docentes, directores y los propios alumnos, quienes recibieron con entusiasmo los libros donados.
“El Día del Libro no es solo una fecha para recordar a escritores o bibliotecas; es una oportunidad para renovar nuestro compromiso con la educación y el acceso al conocimiento”, expresó uno de los socios rotarios durante la entrega.
La actividad forma parte de las acciones sociales que el Club Rotario de Carmelo impulsa de forma sostenida, alineadas con su misión internacional de fomentar la alfabetización, la educación básica y el desarrollo comunitario. En este caso, la donación de libros no solo fortalece las bibliotecas escolares, sino que busca estimular el hábito lector desde la infancia.
Según cifras del último censo, Carmelo alberga a casi 20.000 habitantes, con una importante proporción de niños y niñas en edad escolar. La dotación de recursos didácticos y literarios resulta clave en un contexto donde las brechas de acceso a materiales educativos todavía son una realidad cotidiana para muchas escuelas públicas del país.
Para los equipos docentes, estas donaciones llegan como un apoyo significativo. “El libro impreso sigue teniendo un poder que ninguna pantalla ha logrado reemplazar del todo: el de ser un objeto de descubrimiento, de vínculo, de aventura. Estos libros tendrán mucho uso y muchas lecturas”, comentó la directora de una de las instituciones beneficiadas.
La celebración del Día Nacional del Libro, instaurado en Uruguay en homenaje a la fundación de la primera biblioteca pública nacional en 1816, trasciende lo simbólico. Acciones concretas como la del Club Rotario de Carmelo reafirman que leer —y hacer leer— es también un acto de ciudadanía.
Con esta entrega, la ciudad no solo homenajeó el legado cultural que encierra cada libro, sino que reforzó su apuesta por una educación más inclusiva y equitativa. Porque una ciudad que lee, crece. Y crece mejor.
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