La excavación iniciada por un grupo de antropólogos forenses en un antiguo edificio de la Presidencia uruguaya concluyó sin éxito en la búsqueda de restos humanos, ya que los huesos hallados pertenecían a animales.
Así lo confirmó este jueves a la prensa la directora de la Institución Nacional de Derechos Humanos y Defensoría del Pueblo (Inddhh) uruguaya, Mariana Mota, quien apuntó que todos los demás datos aportados por el testigo que dio la pista fueron verificados.
«La excavación lo que buscaba era ir en búsqueda de lo que decía la persona que había informado y efectivamente eran restos óseos, solo que no eran humanos. Estas circunstancias ocurren; en otros lugares nos ha pasado también», sentenció.
La exjueza uruguaya, que tuvo a su cargo la investigación en numerosas causas por crímenes cometidos en la dictadura cívico-militar (1973-1984), apuntó así que la Inddhh, encargada de la búsqueda de los detenidos desaparecidos durante ese período, seguirá con los trabajos ya iniciados en otros sitios.
«Siempre se está trabajando en varios espacios de forma simultánea. Continuamos trabajando en Toledo (sureste) en otra zona que tenemos cautelada, también en lo que era el Batallón 13 y en el Servicio de Material y Armamento (del Comando General del Ejército)», puntualizó.
Por su parte, la coordinadora del Grupo de Investigación de Antropología Forense (GIAF) que trabaja con la Inddhh, Alicia Lusiardo, detalló que los huesos hallados bajo el piso de uno de los baños del edificio público son de «cerdo, vaca, pez y ave» y es común encontrarlos bajo tierra porque son «restos de alimentación».
«En cualquier relleno hay una mezcla de escombro y otro tipo de materiales, normalmente hay hueso. Uno de los trabajos de los antropólogos forenses es ante movimiento de tierra en cualquier obra hallar restos óseos y el 90 % de las oportunidades responde a restos animales», explicó.
La antropóloga puntualizó que, además de los huesos, que tenían marcas «de sierra», lo que indica que eran restos de consumo alimenticio, se encontraron elementos culturales: cerámica, vidrio, nylon y una moneda, hallazgos también comunes bajo edificios de la Ciudad Vieja, barrio del casco histórico de Montevideo.
La excavación ordenada por la Inddhh en un edificio del Correo Uruguayo -anteriormente usado como garaje de Presidencia- comenzó el 10 de marzo a raíz del testimonio reciente de un plomero (fontanero) que había efectuado trabajos más de una década atrás en ese lugar y tapado los huesos por miedo a denunciarlo.
El interés del caso radicó en que, aunque el lugar no figuraba en el registro que la Inddhh tiene de centros de detención clandestinos, se trabajó con la hipótesis de que los restos podían ser de algún desaparecido.
Uruguay tiene registrados 197 desaparecidos durante la dictadura cívico-militar, que son recordados cada 20 de mayo durante la denominada Marcha del Silencio.
EFE