A tres años familiares piden justicia por tragedia en silo de Fadisol

 

Fue el viernes 6 de febrero de 2015 a media mañana, cuando la explosión de un silo perteneciente a la planta de Fadisol S.A., ubicada en Ruta 21 km 287,500, entre las ciudades de Nueva Palmira y Dolores,se derrumbó y cayó encima de dos operarios de 18 y 20 años de edad, provocándoles la muerte.

Esa tarde la Jefatura de Policía de Soriano informaba: “se establece que en momentos que dichos operarios se encontraban trabajando en la base de un silo metálico, conteniendo aproximadamente 2.000 toneladas de trigo, por causas que se tratan de establecer cedió su estructura de chapa en la parte media, derramándose su contenido y atrapando a los tres funcionarios, logrando salir por sus propios medios uno de ellos, de 20 años de edad, el cual presenta traumatismo de carácter leve, en tanto que los otros dos, quedaron atrapados por la semilla.
Se dio intervención a Bomberos de Nueva Palmira quienes concurrieron al lugar realizando tareas en procura del rescate de los involucrados, Policía Científica y Médico Forense, tramitándose al Ministerio de Trabajo y Justicia Letrada de Dolores”.

Los trabajos de búsqueda de los cuerpos atrapados en el silo dieron comienzo en la mañana del accidente y se extendieron hasta el otro día sin interrupciones. El cuerpo de Nahuel Dualde, oriundo de Nueva Palmira fue hallado en las primeras horas del sábado, mientras que el de Juan Silva, domiciliado en Carmelo, se encontró ese mismo día alrededor de las 07.00 de la mañana.

El operativo de rescate de los cuerpos en el lugar del accidente estuvo a cargo del Jefe de Bomberos de Nueva Palmira Carlos Corrales desde un principio, pero debido a la entidad de lo sucedido, el propio Jefe de Colonia Marino Souza se hizo presente en el lugar.

En la zona del accidente se realizaron tareas en conjunto entre Bomberos de Nueva Palmira, Carmelo y Dolores, quienes contaron con el apoyo de maquinarias de privados.
Quien era  Jefe de Bomberos de Nueva Palmira  Carlos Corrales relató  en aquella oportunidad que el trabajo se hizo en etapas. Constó en “sacar la estructura metálica que había caído y la montaña de trigo que había quedado en el lugar, manejándose entre 1800 y 2000 toneladas”.

“Fue un trabajo de hormiga por medio de máquinas retroexcavadoras” se nos explicó en aquella oportunidad, “si sacábamos los granos de donde suponíamos que estaban los cuerpos, corríamos el riesgo de que cayera nuevamente toda esa montaña, y hubiese sido imposible trabajar”.

El operativo dio comienzo en la mañana de ese viernes y alrededor de las 21 horas “logramos llegar a nivel del piso y limpiar toda la zona de granos” dijo el jerarca, mientras añadió, “luego comenzamos a aspirar los granos del pozo de norias o elevador de granos de 8 x 8 metros, lugar donde quedaron los trabajadores al momento de ocurrir el accidente”.

Entre las 24.30 del día viernes y las 02.00 de la mañana del día sábado “encontramos el primer cuerpo” confirmaba  Corrales, mientras que el cuerpo del segundo trabajador “fue hallado alrededor de las 07.00 de la mañana, pero extraerlo nos llevó más tiempo porque hubo que hacer cortes en metales existentes en el lugar, logrando el objetivo alrededor de las 10 de la mañana”.

Nuestro entrevistado aseguró que se trató de una tarea de más de 26 horas “ininterrumpidas” y explicó que a su entender fue “eficaz y rápido” ya que “tuvimos mucho apoyo de privados que nos dieron una mano impresionante”. “Se trabajó con tres o cuatro retroexcavadoras, una máquina grapo de gran porte y la parte del pozo llegaron a trabajar hasta tres aspiradoras. Si no hubiese sido por toda esta maquinaria, la búsqueda hubiera llevado días”.

El trabajo de búsqueda de los cuerpos también debió realizarse con ciertos cuidados, ya que “siempre hubo riesgo de colapso porque habían sido afectadas las estructuras y lo siguen estando”. Debido a esto “tuvimos que chequear varias veces la zona para que no hubiera movimientos”.

La planta por dentro

Posteriormente al hecho accedimos a la ficha ambiental de la planta de silos de Fadisol del expediente de Dirección Nacional de Medio Ambiente (DINAMA), donde da a conocer diferentes aspectos de la planta que a continuación compartimos en estas líneas.

En dicho expediente se explica que la planta fue construida en etapas. Una vez completada la capacidad de almacenaje aproximada llegó a las 60.000 toneladas.

Los silos son de chapa galvanizada y existen silos de recibo de grano húmedo de 300 toneladas, silos de almacenaje de grano húmedo de 2.000 toneladas, silos de almacenaje de grano seco de 5.000 toneladas; silos con fondo plano de hormigón de 10.000 toneladas, silo de impurezas de 80 toneladas; y silo pulmón de carga de 100 toneladas.

 

El documento de DINAMA daba a conocer previo a la realización de esta planta de silos en Nueva Palmira que; “la construcción de la planta insumirá 10 meses aproximadamente” inaugurándose en el año 2014, siendo este un tiempo “record” para una obra de estas características, que en este caso, estuvo en manos de la empresa CIEMSA.

La respuesta de la empresa en 2015

Fadisol S.A. hizo público un comunicado oficial la tarde en que ocurrió la tragedia en su planta ubicada en las afueras de Nueva Palmira.
El mismo decía lo siguiente:

“La familia de FADISOL S.A. se encuentra consternada por la desaparición de dos trabajadores y se solidariza con sus familiares en estos dolorosos momentos.
La planta de silos fue inaugurada el 2 de abril 2014 construida por un sistema de llave en mano por CIEMSA, una de las prestigiosas firmas nacionales en la materia.
FADISOL S.A. se compromete a agotar todas las instancias disponibles para aclarar lo sucedido”.

A tres años

El martes 6 de febrero familiares, amigos y vecinos se reunirán, a las 19:30 horas, en la Plaza Treinta y Tres de Nueva Palmira en donde leerán una carta en la que exponen sus reclamos; también harán público un video en el que se cuenta parte de la vida del joven Nahuel Duhalde, una de las víctimas.

«A pesar de los años que pasaron todavía no se ha resuelto nada, ni el juicio civil ni el penal», explicó Kassandra Gómez, amiga de Duhalde y una de las organizadoras del reclamo. «Lo que pedimos es que se haga justicia y los responsables del accidente paguen por lo que pasó. Hace tres años que estamos esperando una respuesta», agregó la chica al diario El País.

Salir de la versión móvil