Una verdad incómoda

El Presidente del PIT CNT Fernando Pereira en Finlandia.

“Se consolidó un vínculo histórico y se intercambió sobre temas importantes, como la creación de empleo y conocimiento en el marco de la posible construcción de una (tercera) planta de celulosa en Uruguay”, dijo el presidente del PIT-CNT, Fernando Pereira, luego de mantener una reunión con el Centro de Solidaridad Sindical de Finlandia (SASK), en el marco de la gira oficial que encabeza el presidente Tabaré Vázquez, publica el Portal de Presidencia de la República.

Pereira habló sobre diversos temas vinculados a las inversiones de la industria de la celulosa, lo dijo desde un lugar a miles de kilómetros de Uruguay, desde el Centro de Solidaridad Sindical de Finlandia.

Acá bien cerca en Juan Lacaze, mientras Fernando Pereira está allá bien lejos, se anuncia el cierre de FANAPEL.

Palabras cruzadas

El dirigente Marcos Olaverry  del sindicato papelero dijo hoy a la prensa que «Juan Lacaze va entrar en una emergencia social» en caso  que cierre la empresa. El mismo día el Presidente del PIT CNT le decía a los voceros de Presidencia de la República «abordamos la posible nueva planta de celulosa (de UPM) y asuntos referentes a la generación de conocimiento y la importancia de que quede en Uruguay y de cómo proteger el ambiente”.

Acá Olaverry dice «uno de los principales motores de la economía se acaba y quedamos 300 compañeros que no tenemos futuro ni mercado laboral para trabajar». Allá -en cambio- Pereira dice «“Fue una reunión muy alentadora”, pues los anfitriones se “han mostrado abiertos a cooperar con los sindicatos de metalúrgicos uruguayos que estarán en el montaje de la planta de celulosa, si se concreta, y de los papeleros cuando la planta funcione.»

Sí, ambos hablan de cosas distintas.  Pero no se me ocurre una aparición tan fuera de lugar y poco feliz la que muestran hoy los canales de televisión del Presidente del PIT CNT Fernando Pereira, allá en Finlandia, cuando acá en Juan Lacaze hay una emergencia social en proceso en una empresa del mismo palo.

Hay dos discursos que plantean interferencias profundas. Uno habla de la realidad, el otro de proyectos. Uno se encuentra en el horno con los obreros y familiares al borde de perder su trabajo y el otro de gira por el primer mundo.

Es probable y deseable que de esas conversaciones con actores finlandeses se logren los mejores resultados. Todos los uruguayos deseamos eso.

Pero hay algo que no se puede negar, ver en el mismo momento a dos personas en situaciones muy distintas, una apagando un incendio y el otro de viaje, a miles de kilómetros de la realidad uruguaya.

Elio García

 

 

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