Las empresas de la Sectorial Lechera de la Federación Uruguaya de Grupos CREA (Fucrea) registraron nuevamente la rentabilidad promedio más alta del movimiento en el ejercicio 2024-2025, con un 5,21%, por encima de las agrícolas-ganaderas (4%) y las ganaderas (2,76%), señaló Búsqueda. En moneda constante, el poder adquisitivo de las empresas lecheras fue 47% superior al promedio de los últimos diez años, consolidando un ejercicio que, sin ser el mejor de la serie, se ubicó entre los más favorables en términos históricos.
El ingreso de capital promedio alcanzó los US$ 594 por hectárea, apoyado en un activo medio de US$ 11.395 por hectárea, en un contexto marcado por relaciones de precios favorables, con valores históricamente bajos de cereales y soja, principales componentes de la alimentación del rodeo. Si bien el costo de alimentación representó el 52% de los costos variables, no se registraron cambios relevantes respecto al ejercicio anterior. La producción promedio se mantuvo prácticamente estable, con 6.209 litros por hectárea, por lo que la mejora económica estuvo explicada principalmente por el mejor precio de la leche, que se ubicó por encima del ejercicio previo en dólares constantes.
El informe, que analiza 102 empresas CREA lecheras, muestra diferencias internas significativas: el 25% con mejores resultados logró un ingreso de capital de US$ 966 por hectárea, impulsado por un aumento de la producción asociado a una mayor carga de vacas masa. Las empresas diversificadas alcanzaron una rentabilidad del 4,75%, mientras que las que incorporan sistemas de encierro —con mayor nivel de activos— registraron la rentabilidad más alta del conjunto, con 6,76%, aunque Fucrea advierte sobre las limitaciones para comparar estos sistemas.
En el plano financiero, el endeudamiento se mantiene en niveles considerados manejables: el pasivo exigible representa entre 11% y 18% del patrimonio, y el 87% de las empresas podría cancelar su deuda en menos de cinco ejercicios, con un perfil mayoritariamente de largo plazo. De cara al ejercicio 2025-2026, Fucrea proyecta un escenario favorable, con buena base climática y precios aún firmes, aunque señala desafíos vinculados a la productividad, la calidad de las inversiones y la sostenibilidad de los sistemas productivos.